5 mitos sobre el éxito en el emprendimiento

Hoy en día es algo habitual oír hablar sobre el éxito. Queremos tener éxito en el trabajo, en nuestra vida personal, en la vida. Pero, ¿qué es exactamente el éxito? Todos hemos oído eso de… “es una empresa de éxito” o “es una persona muy exitosa”. Hoy queremos compartir con vosotros cinco mitos relacionados con el emprendimiento que creemos que pueden seros de utilidad. Cuanto antes dejemos de creer en ellos, ¡mejor!

1. El éxito significa lo mismo para todo el mundo

No todo el mundo tiene las mismas aspiraciones ni comparte el mismo concepto sobre lo que el éxito es. Incluso en el mundo del emprendimiento el éxito puede ser significar una cosa diferente para cada persona. Algunas personas consideran que el éxito es conseguir mucho dinero, otras conseguir el perfecto balance entre sacar adelante su empresa y conciliar su vida personal, otras lograr que su empresa se internacionalice o incluso poder ayudar gracias a su idea de negocio, impactar en otras personas para bien. Cada uno tiene una forma de ser, de pensar y de vivir. Por consiguiente, lo realmente importante es conocerse a uno mismo, saber cuál es nuestra idea de éxito y luchar por conseguir nuestras metas.

2. Cuanto más duro trabajes, mayor será el éxito

El trabajo duro es vital para una startup y para cualquier emprendedor o emprendedora que desee hacer crecer su proyecto. Siempre hay algo que hacer, alguna cosa en la que hay que trabajar o que se puede mejorar. Tendemos a pensar que, con suficiente esfuerzo, conseguiremos aquello que nos planteemos. Esta idea tiene doble cara, ya que por una parte nos impulsa a luchar por nuestras metas, lo cual nos acercará a las mismas, pero por otro lado, puede ser una manera tóxica de pensar para quienes buscan llevar su negocio al siguiente nivel.

Siempre podemos encontrar cosas que hacer, pero es necesario tener un plan, estar seguros de qué es lo que tenemos que hacer en cada momento y, asimismo, tomar los descansos necesarios. Tomar un respiro, descansar y alejarse un poco de las cuestiones del trabajo evitará el agotamiento y la fatiga que surgen por trabajar demasiado duro o durante mucho tiempo. Encontrar el equilibro entre el trabajo y el descanso nos acercará aún más al éxito que buscamos para nuestra startup o negocio.

3. El éxito es cuestión de suerte

El éxito no depende de la suerte. El éxito se consigue trabajando y esforzándose por conseguir lo que se desea, tanto si se trata de montar tu propia empresa, hacer crecer tu startup o aprender cualquier habilidad nueva. Como dice Anxo Pérez: «No llega más lejos quién más suerte halla, sino quién más millas camina”. Así que, no os quedéis esperando a que llegue la suerte, id en busca de las oportunidades y ¡no las dejéis escapar!

4. El éxito se consigue atacando lo malo

En muchas ocasiones tendemos a centrarnos en las cosas que hacemos mal, nos focalizamos en los errores y cómo podríamos haberlo hecho mejor, o cómo podemos arreglar esto o aquello. Lógicamente a todos nos gusta que las cosas salgan bien, y esforzarse por ello es importante. Sin embargo, poner lo malo en el punto de mira constantemente y solo resaltar los errores de nuestros compañeros, subordinados o incluso los propios, puede tener un efecto contraproducente.

Vivimos en la cultura de la crítica en vez de en la del aplauso, y deberíamos esforzarnos más por celebrar lo bueno en lugar de corregir lo malo, ya que esto motivará e ilusionará mucho más a quienes nos rodean y ayudará a mejorar todo aquello que nos planteemos de una forma más fructífera.

5. Los datos siempre son la respuesta

Aunque los datos son un componente muy importante para cualquier empresa, pueden suponer un obstáculo cuando únicamente basamos nuestras decisiones en ellos. Lo ideal es utilizar los mismos como fuente de información, buscar cómo usarlos para mejorar nuestra situación y para hacernos preguntas más útiles, que nos guíen hacia soluciones innovadoras y creativas que aporten verdadero valor a nuestro proyecto.

Y vosotros ¿qué opináis sobre el éxito? ¿Qué otros mitos creéis que es necesario romper?